Desideria Pérez es una hondureña de 69 años que desde muy joven aprendió a crear artesanías trabajando el barro. Este aprendizaje que obtuvo desde pequeña, la ayudó a sacar adelante a sus diez hijos, ya que esto la motivó a comenzar a vender diferentes artículos elaborados a mano, mismos que las personas han recibido muy bien y le han permitido seguir en el mercado.

Este arte con el barro viene de generación en generación, pues doña Desideria cuenta que su madre la alentó aprender de la alfarería. Su gusto por este trabajo y las circunstancias, la llevaron a convertirse hoy en día en una de las alfareras más famosas y reconocidas de La Campa, Lempira.

Le puede interesar: Gracias, un destino que guarda encantos naturales y arquitectónicos

Casa de la hondureña doña Desideria Pérez.

Casa de la hondureña doña Desideria Pérez.

Sus inicios en la alfarería

La hondureña inició desde muy joven trabajando el barro, al inicio elaboraba artículos pequeños y con el paso del tiempo y la práctica comenzó a elaborar algunas piezas más grandes.

Al crecer se caso y formo una familia, donde tuvieron diez hijos a los cuales formo a nivel académico a base de su trabajo con la alfarería.

Una de las personas que influyó en doña Desideria para seguir con este arte, fue su suegra que también trabajaba el barro, a quien consideró como una de sus mejores maestras en ese arte. Esta hondureña buscaba crear una mayor cantidad de productos para ahorrar la leña, de este modo, generaba más pieza con menos recursos pero se tardaba más tiempo.

Mire más: Cascada El Barro, encanto natural ideal para avensurarse en Güinope

Esta hondureña ha logrado crear diferentes artesanías, desde jarrones hasta algunos anafres.

Productos a base de barro

A su tan avanzada edad Doña Desideria tiene en su casa múltiples piezas para vender donde se pueden encontrar: anafres, tazas de café, jarras de cerveza, floreros, entre otros. Cabe resaltar que cada parte de estos productos en barro le tarda diferentes días en construirlos, puede ser un día o hasta tres.

Esta hondureña de 69 años, sigue con el mismo vigor igual a cuando era una niña, su pasión por crear estas piezas artesanales que son tan propias de la cultura hondureña, hacen de esta labor un verdadero orgullo. Si usted anda por La Campa en el departamento de Lempira, debe de visitar esa casa donde está mucha de las raíces de honduras plasmadas en barro.

 

 

Ver esta publicación en Instagram

 

Una publicación compartida de Honduras Tips (@hondurastips)