Honduras tiene rincones llenos de historias por contar, relatos que nuestros ancestros dejaron al misterio que todos desconocemos. Uno de ellos es la historia de La Laguna Púrpura de Locomapa, una historia que deja encantado a todo el que la conoce.

La laguna púrpura de Locomapa es de esos misterios, que llenan de curiosidad por su historia muy peculiar que describe el color de una laguna que existió en el país y desapareció sin dejar rastro; dejando mucha intriga por su existencia y la majestuosidad que representó para Honduras.

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Las lagunas de Honduras comparten muchas historias.

Laguna de colores

La historia sobre la laguna describe la tonalidad de colores, que se veían en las aguas de la bella laguna, relatan que sus aguas se tornaban de color verde durante la mañana, y a mitad del día sus aguas se volvían de un color púrpura. Cabe destacar que dentro de su historia también se decía que sus aguas tenían un alto oleaje, avisando la temporada lluviosa.

El relato data de principios de siglo XX, y ha sido rescatado por la Revista del Archivo y Bibliotecas Nacionales. Su historia deja un sin numero de preguntas respecto a su desaparición y ubicación; de acuerdo al relato, la laguna purpura estaba ubicada en el caserío El Chamuscado, Locomapa, Yoro.

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laguna

Según la historia de este encanto su misterio es considerado una leyenda.

Una historia que contar

En su relato menciona algunos de los misterios de la laguna de Locomapa, uno de ellos es que las aguas de la laguna volvían su oleaje embravecido, cuando se escuchaba bulla de la gente en su costa. Es por ello que dicen que sus visitantes procuraban no hacer ruido.

Respecto a su desaparición, en la misma historia se cuenta que fue producto de una catástrofe natural, en la cual se desato una tormenta tempestuosa; donde rayos y centellas caían a la comunidad y una centella cayó a la laguna, que la describe como una serpiente que yacía herida, huyendo hacia su fatal muerte.

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Sin duda es una historia para contar y rescatar de ella lo esencial que es cuidar nuestra naturaleza y disfrutar del regalo que nos da; la laguna purpura es de esas realidades, que son diferentes y aun desconocemos.