La historia de Honduras está llena de huellas ancestrales que prevalecen con los años, en Oropolí, El Paraíso, se encuentran algunos petroglifos, que trascienden 10 mil años al pasado. Estos eran conocidos como el arte rupestre, que encierra una vasta historia sobre nuestro país.
Se trata de petroglifos grabados en distintos puntos de farallones cerca del río de Oropolí; los cuales representan un legado lleno de misterios por descubrir. Razón por la cual esto se han convertido en un patrimonio de suma importancia para conocer más de cerca a nuestros antepasados.
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Petroglifos, un misterio artístico
Los petroglifos son un misterio artístico, esto se debe a su antigüedad y a sus representativos dibujos, que describen la vida de esos habitantes, que grabaron sus hazañas y eventos de la época en un mural, que trascendió el tiempo y quedó intacto por años. Este arte transmite un mensaje histórico y se remonta a muchos años atrás.
Este arte rupestre es representativo con figuras geométricas, antropomorfas y zoomorfas, estas últimas son imágenes naturalistas o fantásticas; que representan animales o espacios en el contexto de donde transcurre el hecho. Incluso en algunos casos los petroglifos representan divinidades que adoraban nuestros ancestros.
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Huellas intactas
Oropolí es de esos encantos naturales de Honduras, donde podemos disfrutar de sus maravillas y apreciar la historia que este rinconcito guarda; con sus misteriosos petroglifos. Que sin duda es un gran hallazgo, lo que estas pinturas rupestres nos enseñan; podemos aprender mucho sobre nuestro origen como humanos y también saber que nuestra tierra fue el hogar de muchos, hace miles de años.