De origen humilde pero luchador en cada aspecto de su vida, Iván Vásquez, originario de Marcala, se convirtió en el primer catador hondureño que representó a Honduras en varias competiciones nacionales e internacionales. Para llegar a estas instancias superó una serie de retos que lo fortalecieron como profesional.
“Provengo de una familia muy humilde, soy lenca puro, porque toda mi familia es de La Paz, pero nunca me falto nada gracias a los esfuerzos de mi mamá”, comentó Vásquez.
Vásquez nació y creció en los campos de café, con el paso del tiempo se dio cuenta la gran conexión que poseía con la tierra y el café, al punto que desde su niñez comenzó ayudando a su familia en la siembra de las semillas de café.
“Fueron años críticos de sangre, sudor y lágrimas, pero fui asumiendo esos retos y aprendiendo, dándome cuenta que a través del café me abrían las puertas”, mencionó Iván.
Lea esta nota: Pareja marcalina, pioneros de arte con café de Honduras
Brillando con el café desde su niñez
Siendo un niño se volvió especialista en seleccionar las semillas de café y en la siembra. Por su buena mano a la producción de sus semillas y plantas se formó más rápido que el resto de sus compañeros, también aprendió a podar, limpiar, darle tratamiento a las plantas hasta conseguir el respeto de los jefes y compañeros.
El mayor reto que enfrentó fue cortar el café, pero con la práctica logró las metas que deseaba la finca donde trabajaba con menos de 15 años. Gracia a su perseverancia y sus ahorros consiguió graduarse de perito mercantil, y la empresa donde laboraba le dio la oportunidad de ser pesador de café en una cooperativa.
“Era un puesto muy delicado que no se le daba a cualquiera, trabajé por 13 años donde fui formado como catador y en esa cooperativa, gané el primer lugar de una competencia en San Pedro Sula”, añadió el catador.
Le puede interesar: Emilio Irías conquista Miami con café de Santa Bárbara
Sus logros internacionales
Al lograr su primer galardón en Honduras como catador, tuvo que buscar un nuevo empleo debido al cierre de la cooperativa, pero en vez de desesperarse buscó otros puestos hasta que otra empresa lo contrató como el nuevo jefe de producción. Cabe mencionar que fue de los empleados más desenvueltos y sus habilidades lo llevaron al plano internacional con el café.
“El Instituto Hondureño del Café (Ihcafé) llamó a los 200 catadores de café activos en Honduras para participar en un programa de USAID y logré clasificar entre los primeros 11, esto elevó mi perfil como catador profesional entre talleres, prácticas y viajes por Centroamérica”, sostuvo el catracho.
Le recomendamos: Café de Marcala, exquisitez de Honduras
Entre 55 participantes en la competencia internacional, Iván Vásquez, alcanzó el primer lugar entre varios jóvenes expertos en este rubro.
En 2006 decidió regresar a Marcala para iniciar una familia, también continúo su preparación profesional y logró una certificación de calidad de café de la Asociación Americana de Cafés Especiales (SCAA).
Además: DO Café Marcala certifica el mejor café de La Paz
Su peldaño más alto como catador
Su formación y su alta competencia hizo que viajará hasta Alemania para participar contra 36 catadores internacionales y logró que la bandera cinco estrellas brillará en los primeros puestos al llegar hasta la final contra Brasil, Guatemala, México y Colombia.
Luego de los torneos y ganar una beca en 2013 en Japón, Iván Vásquez, decidió especializarse en marketing en formulación de proyectos y posicionar su propia finca llamada Los Catadores, actualmente una de las mejores en la región y su restaurante Exóticos Café.
Su producción es de altos estándares de calidad que caracteriza el café de Marcala, y de esa forma ya está exportando su grano a Suiza, Alemania, Inglaterra y España.
Pero eso no es todo, Vásquez, ofrece exquisitos tés a base de hojas de café, producción que ha cautivado a los marcaliños, hondureños y extranjeros.
