Definitivamente don Hermelindo Hernández es un hondureño cinco estrellas y un ejemplo de bondad que los hondureños debemos imitar. Y es que su generosidad es tanta que, desde hace más de 30 años, este buen samaritano regala leche a los más necesitados.

Cada viernes santo don Hermelindo ordeña muy temprano sus vacas en su “Finca Hernández”, y el producto es regalado a las personas de escasos recursos que viven en la comunidad de Descombros en Jutiapa, Atlántida.

Las personas, especialmente niños,  se organizan en una fila con sus recipientes en mano al frente de la casa donde reside el ganadero. Esta fila se hace más extensa año con año, pues son muchas las personas que esperan el nutritivo líquido y que agradecen esta noble acción.

Cabe mencionar que es un alimento esencial en el crecimiento de los niños y es mucho más beneficiosa si se consume recién extraída de la vaca. La leche está cargada de calcio, proteínas y otros nutrientes que favorecen al crecimiento y buena salud de los pequeños del hogar.

Don Hermelindo comparte el producto de su trabajo, esta acción es digna de admiración, no solo por la comunidad de Descombros, también por toda Honduras.

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