El guiffity es una bebida preparada asociada con la comunidad garífuna, que toma nombre de la palabra de esta misma lengua para «amargo». Con sus orígenes como un brebaje medicinal de los afrodescendientes de Honduras, sus ingredientes incluyen hierbas como manzanilla, pericón, anís, pimienta gorda, clavos de olor y palo de hombre, entre otros.

Aunque consiste en una base de siete plantas, el guiffity puede llegar a incluir cerca de 38 tipos de raíces, hojas, ramas, flores y semillas diferentes. Estas pueden variar dependiendo de la receta, que muchos Garífunas protegen como uno de los secretos mejor guardados de su familia y su cultura.

Uso

El guiffity, se dice, tiene función de tratamiento medicinal para los Garifunas – creencia que se extienda más allá de los pobladores hondureños de ascendencia africana. Ellos le aducen facultades de sanar malestares así como de potenciar el libido de los hombres.

La bebida se ha utilizado como medida preventiva, así como para tratar desde calenturas y estrés hasta dolores menstruales y de espalda. Para algunos, el guiffity está detrás de brindar a la comunidad garífuna vidas más largas y sanas.

Sobre todo, por supuesto, se enfatiza la discreción con el uso del guiffity y el manejo responsable enfocado en su fin medicinal y no por el efecto embriagante al abusarlo. La medida recomendada son no más de tres tragos pequeños al día.

Aunque se conocen algunos de los ingredientes que forman la base del guiffity,
las recetas varían – y se resguardan mucho entre la cultura Garífuna.

Preparación

Todos los ingredientes se combinan en un bote junto con el licor de su preferencia – entre los más populares se encuentra el ron y el aguardiente, aunque originalmente se preparaba con agua. Según la receta, se entierra o bien se pone al sol para su fermentación y generalmente al cabo de una o dos semanas tiene el color deseado.

La historia del guiffity y los garífunas en Honduras

Los garífunas arribaron en la costa atlántica de Honduras hace más de dos siglos, el 12 de abril de 1797, en la comunidad de Punta Gorda, Roatán, trayendo consigo un sinnúmero de tradiciones milenarias. Los primeros afrodescendientes que llegaron a Honduras lo hicieron en condición de prisioneros de guerra, procedentes de San Vicente.

En el pasado, sus ancestros preparaban el guiffity dentro de sus comunidades, colocando en una botella de agua hervida las raíces de «palo de hombre», pimienta gorda, manzanilla, clavos de olor y otras especies para curarse de diferentes males, debido a la falta de médicos.

La comunidad Garífuna de Miami, que conserva muchas de sus tradiciones e
incluso la arquitectura original.

Hoy en día, además de mantener su posición como remedio garífuna, el guiffity es también una ventana a la cultura y a los antecedentes históricos de Honduras. Es una experiencia de inmersión cultural que no puede dejar pasar – por supuesto, siempre con medida. ¡Disfrútela!

¡Cuéntenos sobre sus encuentros con el guiffity! ¿Lo disfruta amargo o dulce?