El mundo marino contempla una gran diversidad de especies, muchas de ellas llevan más años habitándolo de lo que podríamos imaginar, tal es el caso de la tortuga verde y la tortuga boba que emergen en las aguas de las Islas de la Bahía.

Estos peculiares embajadores del mar recorrer grandes distancias a lo largo de su vida y siempre regresan al lugar donde nacieron. Tener la oportunidad de verlas nadar libres en su habitad natural es una experiencia inolvidable y mágica.

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Ver estas tortugas marinas no es tan sencillo, ya que normalmente suelen evadir a los humanos, sin embargo, la tortuga verde y la tortuga caguama pueden ser vistas cerca del arrecife de coral porque necesitan de  aguas tropicales y subtropicales, poco profundas.

A las personas les emociona saber en que existen probabilidades de toparse con alguna de estas tortugas en su vista en las Islas de la Bahía, lo cual en efecto puede suceder.

Su aspecto cautiva porque encaja muy bien con las aguas turquesas o cristalinas que posee Roatán, Utila y Guanaja. Las personas adoran verlas porque su pequeña nariz y penetrantes ojos negros provocan que adoremos a estas pacificas criaturas.

Pero, no todo es color de rosa. Lamentablemente estas tortugas han entrado en categoría de peligro de extinción, principalmente porque la actividad humana como la cacería ha disminuido su población en gran manera.

Es por ello que le contamos más de la tortuga caguama y la tortuga verde.