Robby Clemens, trotamundos de nacionalidad alemana, ingreso  a pie por la aduana El Amatillo, para seguir su caminata que empezó en el polo norte en el mes de abril del año pasado y finalizara en el polo sur en diciembre de este año, o enero del 2019.

“Quiero lograr que los seres humanos nos demos cuenta que es muy importante que nos conozcamos mutuamente ya que en todos los países del mundo hay gente maravillosa” comentó el señor Clemens al consultarle cual es el objetivo de su travesía.

En su paso por el sur de Honduras tuvo la oportunidad de conocer las ciudades de San Lorenzo y Choluteca, en los cuatro días que estuvo en suelo hondureño, destacando lo fantástico que ha pasado, la amabilidad y el trato de las personas, las montañas y los hermosos paisajes, naturaleza virgen, aguas termales impresionantes donde el rio mantiene la temperatura del agua algo que nunca había visto, “es un gran tesoro tener una naturaleza como está “comento.

En el año 2000 Robby participo en su primera maratón que lo motivo y le ayudo a salir de su adicción al Alcohol y encaminar su vida, después de que su empresa cayera en  bancarrota y lo dejara viviendo en la calle. Ahora el correr se ha convertido en parte de su vida.

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El señor Clements ha participado en maratones de caridad a favor de los niños afectados por la guerra de Irak, que se realizó desde Basora hasta Bagdad, también 1800 km. a favor de la Sociedad de Cáncer Infantil de Salzburgo, en 2002 recorrió 520 km a través de Alemania para la Sociedad de Cáncer Infantil de Alemania Central, además de realizar el WorldRun (carrera mundial) donde corrió 13,262 km a través de 27 países en 4 continentes.

El trotamundos alemán, para llegar hasta la sultana del sur, ha caminado desde el polo norte, Groenlandia, Canadá, Estados Unidos, Guatemala, El Salvador, para salir de Honduras el miércoles por la frontera de Guasaule a Nicaragua, seguido de Panamá, Costa Rica, Colombia, América del Sur, hasta llegar a Argentina donde tomara un avión que lo llevara hasta la Antártida y ahí caminara de 800 a mil kilómetros hasta el polo sur.