Pam Grout es más que una escritoria de viajes, es una apasionada por las experiencias nuevas y los destinos inexplorados. Su recorrido por todos los continentes del mundo la trajeron hasta Honduras, específicamente hasta la zona de Atlántida. Lea su apreciación en un artículo escrito para Huffington Post, en el que habla de la riqueza natural de Honduras – una que no tiene nada que envidiarle a ningún otro país: 

 

Honduras es más del doble del tamaño de Costa Rica, tiene el doble del área protegida y es más fácil de llegar desde los Estados Unidos.

Realmente la única diferencia, según James Adams, el naturalista principal en The Lodge at Pico Bonito, es el simple hecho de que «Costa Rica tiene más experiencia en marketing. Su Junta de Turismo tiene diez veces el presupuesto.»

Y claro, también se debe mencionar ese pequeño detalle sobre las Naciones Unidas declarando San Pedro Sula, la ciudad donde circulan la mayoría de los turistas, como la ciudad más peligrosa del mundo.

Pero como siempre me gusta decir, ¿qué son vacaciones sin un poco de aventura?

Es por eso que recientemente visité el Lodge at Pico Bonito. Está ubicado justo en medio de la selva de Honduras, limita con las montañas que los hondureños llaman «Cordillera de Nombre de Dios » y tiene exactamente los mismos monos, aves y jaguares como su famoso vecino.

De hecho, Elmer, nuestro guía que hace una fabulosa imitación de un mono aulladora, utilizó un libro sobre la flora y fauna de Costa Rica para señalar los animales que pasábamos en nuestras caminatas y paseos en canoa por los manglares.

«Simplemente no hay dinero para el turismo», lamenta Adams, quien se mudó a Honduras desde Nueva Jersey hace 13 años debido a la tremenda vida silvestre.

Nos explicó que «probablemente descubrimos al menos 12 especies nuevas aquí cada año». «Honduras es rica en vida silvestre. Es un paraíso de eco-turismo. Tenemos cuatro especies de tucanes y más de 20 especies de colibríes. Y queda a solo dos y media horas de vuelo de Houston y Miami.»

Razón por la cual regresa a los Estados Unidos varias veces al año para promocionar su país adoptado. Hace conferencia con Audubon y otros grupos de observación de aves cada vez que puede. Impulsó la construcción del mariposario en Pico Bonito (donde se cría más de 40 especies de mariposas tropicales incluyendo el morpho azul), el Serpentario y la Casa de Iguanas. Cuando estuve allí, estaba entusiasmado con las ranas de ojos rojos que habían llegado a aparearse en el estanque que recientemente había excavado con su equipo de guías bilingües. Y dice que por lo general se siente más seguro en Honduras que en los EE.UU.

The Lodge at Pico Bonito también cuenta con varios kilómetros de senderos privados a través de cañones de 100 pies, a las cascadas y pozas naturales, un trío de plataformas de observación de cuatro pisos con vistas al dosel de la selva y una variedad de aventuras desde rafting hasta safaris a través los manglares.

¿Y en cuanto a esas advertencias del Departamento de Estado? Lo único que puedo decir es «que tontería». Nunca me he sentido tan segura, o conocido gente tan amable y tranquila durante un viaje. De hecho, The Lodge at Pico Bonito se destaca a la par de cualquier hotel de cinco estrellas en climas del norte. Ubicado en la frontera de un parque nacional del mismo nombre y a casi dos kilómetros de la carretera principal, el único «peligro» es chocar accidentalmente contra un árbol por estar tan envuelto en la observación de nidos de tucán o cautivado por el movimiento pendular de una cola motmot.

The Lodge at Pico Bonito fue elegido por National Geographic como uno de los mejores hoteles ecológicos del mundo, pertenece a Small Luxury Hotels of the World y, bueno, digamos que Sports Illustrated no filmó uno de sus ediciones de trajes de baño allí para nada.

Así que, sí… me comí una termita (que sabe como pimienta negro) y me quedé a pocos metros de un par de víboras mortales (que estaban detrás de un vidrio en el Serpentario), pero nunca me sentí amenazada o en cualquier tipo de peligro.

Muchas veces tuve que pellizcarme. ¿Es esto un sueño o estoy realmente en medio de esta selva, acompañada por pájaros y ranas arbóreas de ojos rojos, mientras me tomo un café con medallones de lomo? ¿Es posible que cordero asado con ratatoullie y habichuelas salteadas estén servidos en un menú a pocos pasos de ocelotes y guatusas y tropas de monos aulladores?

Aunque la comida por sí solo vale la pena hacer el viaje a este hotel retirado a solo pasos de la costa caribeña de Honduras, la mayor atracción, la razón por la cual sus 22 cabañas están reservadas todo el año, son sus cotingas azules, lagartijas (conocidos como lagartos de Jesús porque corren sobre el agua), monos aulladores, cocodrilos, garzas verdes y los campos de lirios de agua de color púrpura. En otras palabras, la Madre Naturaleza.

The Lodge at Pico Bonito tiene 22 cabañas de madera, de 400 pies cuadrados con terraza privada, hamacas, ventiladores de techo, conexión Wi-Fi gratuita y techos abovedados.