Las manifestaciones son producto de los aportes que han realizado nuestras distintas etnias a través de los años, como ser: los tolupanes, o jicaques localizados en el departamento de Yoro y Francisco Morazán. Los lencas localizadas al sudoeste de Honduras en los departamentos de Lempira, Intibucá, La Paz, Ocotepeque, Copán, Comayagua y Francisco Morazán. Los mayas chortís localizado en una pequeña porción de los departamentos de Ocotepeque y Copán. Los tawahkas, pech, o payas y los misquitos, localizados en la costa del Caribe y que se dispersan tierra adentro a través de los ríos y lagunas de la plataforma costera.

Los Garífunas se encuentran dispersos a lo largo de toda la costa norte del país. Los afros americanos comparten territorios con los garífunas, que se concentran en las Islas de la Bahía. Sumado a estas culturas, la población mestiza con diversas procedencias, pero con fuerte ascendencia hispanoamericana se ha apropiado de algunos rasgos culturales de estos grupos, desarrollando sí mismo una serie de manifestaciones muy propias. Las manifestaciones artísticas de la cultura popular tradicional hondureña pueden clasificarse de la siguiente manera: