El calendario cívico hondureño celebra el 3 de octubre el “Día del Soldado Hondureño” en homenaje al General Francisco Morazán. Además de ser un militar insigne, ha quedado en la historia como un eminente estadista y el principal propulsor y defensor del republicanismo liberal, la democracia y la unión centroamericana.

En 1942, por Decreto No. 49, el Congreso Nacional de Honduras declaró el aniversario del nacimiento del General Morazán como Día del Soldado Hondureño por ser un deber del Estado “rendir homenaje a la memoria de los ciudadanos ilustres que sacrificaron su vida por la Patria”, como lo hizo el prócer hondureño.

Esta fiesta nacional de Honduras se decretó “considerando que la institución de las armas constituye el fundamento sostenedor de las naciones”, representada por los soldados de Honduras, como lo fue el General Morazán. En el decreto, se le describe como “modelo insuperable del pundonor, abnegación y sacrificio”.

Tradiciones

Como día de asueto nacional, instituciones gubernamentales y educativas, así como empresas privadas, toman un día de descanso para conmemorar esta fiesta nacional de Honduras.

Las Fuerzas Armadas de Honduras, las Secretarías de Defensa y Seguridad y otras organizaciones afines hacen celebraciones. Ciudadanos adornan las estatuas del General Morazán con arreglos y coronas de flores.